¿La negrita o la cursiva mejoran el posicionamiento?
Entre las técnicas fetichistas de algunos “expertos SEO”, está la negrita o cursiva de ciertas partes del texto que contienen expresiones claves interesantes.
Antes de hablar del apetito potencial de los motores para este tipo de procesos, es importante volver a las fuentes, es decir, al HTML.
A menudo se utilizan las siguientes cuatro etiquetas: La pareja "b/strong" de un lado y "em/i" del otro.
En la mayoría de los navegadores modernos, el uso de «b/strong» hace que la pantalla muestre en negrita el texto etiquetado mientras que «em/i» generan una pantalla en cursiva.
Cabe señalar que para em y strong, los resultados observados provienen sólo de una elección totalmente arbitraria de los navegadores (Chrome, Firefox, Edge...).
Sólo <i> (para cursiva) y <b> (para negrita) requieren explícitamente una representación gráfica específica.
<em> requiere un énfasis mientras que <strong> requiere un énfasis aún mayor.
Así que, para un objetivo puramente visual, es preferible usar <i> y <b> (y es aún más deseable usar estilos CSS como prioridad).
Para el marcado semántico, preferimos <strong> y <em>, seguramente como los motores de búsqueda.
Sin embargo, el bonus proporcionado es difícil de cuantificar, pero sin duda es relativamente pequeño. Sin embargo, resaltar su contenido en negrita puede tener un impacto visual definitivo en el usuario. Pero tenga cuidado, demasiada negrita no es conveniente, con riesgo de dar un efecto contrario al esperado.